
Método 1
de español
Autores:
Robles Ávila, Sara
Cárdenas Bernal, Francisca
Hierro Montosa, Antonio
Son tres fenómenos relacionados con el empleo incorrecto de los pronombres personales átonos de tercera persona (tanto en singular como en plural).
– El laísmo es la utilización indebida de la, las como complemento indirecto de persona, en lugar de le, les, que son las formas que han de usarse para el masculino y para el femenino: *La dije que estaba muy guapa por Le dije que estaba muy guapa.
– El leísmo consiste en emplear le, les como complemento directo cuando lo correcto sería lo, la, los, las: *Los papeles, déjales aquí mismo por Los papeles, déjalos aquí mismo.
No obstante, cuando el complemento directo es masculino de persona sí está admitido el leísmo: A mi novio le conocí en casa de unos amigos.
– El loísmo es la utilización indebida de lo, los como complemento indirecto de persona, en lugar de le, les: *A mi hermano lo pusieron una medalla por A mi hermano le pusieron una medalla.